II. DEPENDENCIA

 Diferencia entre dependencia y discapacidad

Una persona se considera dependiente cuando requiere cuidados de otra persona o apoyos adicionales para realizar actividades básicas de la vida diaria (ABVD).

No obstante, es importante no asociar discapacidad con dependencia en términos absolutos. Según la Declaración de los derechos de las personas con discapacidad, “el termino persona con discapacidad designa a toda persona incapacitada de atender por sí misma, en su totalidad o en parte, a las necesidades de una vida individual o social normal a consecuencia de una deficiencia, congénita o no, de sus facultades físicas o mentales”. Si bien estas personas no pueden llevar una vida “individual o social normal” como consecuencia de una deficiencia física o mental, no significa que puedan ser autónomas e independientes. Hoy día, con los avances tecnológicos y las políticas sociales, son más las personas discapacitadas que pueden disfrutar de una vida digna sin depender de otras personas.

Por tanto, no todas las personas con discapacidad son dependientes, ni todas las personas dependientes tienen alguna discapacidad, aunque sí hay una relación estrecha entre la discapacidad severa y la dependencia, al igual que existe entre el envejecimiento y la dependencia.

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